El consumismo es una práctica con efectos positivos y negativos que innegablemente perdurará mientras la raza humana exista. Consumimos bienes y servicios para subsistir, pero también para entretenernos, educarnos y construir relaciones con otros seres humanos.
Es por eso que la misión de muchas empresas y personas en el mundo es la transición de una economía lineal a una circular, en la que el cuidado de los ecosistemas y la humanización del trabajo sean la base de las acciones realizadas.
Un estudio efectuado por Circle Economy reveló que la humanidad está consumiendo alrededor de 100 billones de toneladas de materiales y sobrepasando el grado de incremento en la temperatura global, con un aumento estimado de 3.2 grados.
Pese a existir una voluntad por parte de los gobiernos y las personas, no ha sido suficiente para disminuir los porcentajes de la economía lineal y, mucho menos, las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). El Circularity Gap Report anunció en su informe de 2022 que la economía circular era 8.6% y no ha cambiado en el último año.
El cambio verdadero requiere de acciones concretas y universales en las que no basta que sólo unos cuantos se sumen.
Ventajas de la economía circular
Los inicios de la economía circular no tienen una fecha específica pero se estima que, a finales de los años 70, se establecieron las primeras iniciativas en el mundo, con el objetivo de impactar positivamente en la economía desde una producción basada en el respeto a los recursos naturales.
Este modelo de producción y consumo se divide en cuatro etapas: producción, reparación/mantenimiento/reutilización, remanufactura y reciclaje. A diferencia de la economía lineal, desde el primer momento, busca la obtención de materias primas de fuentes de energía renovables o productos con posibilidad de incorporarse a una nueva cadena productiva.
Otra de las ventajas de la economía circular es que es capaz de satisfacer las necesidades humanas con menos elementos, lo cual impacta directamente en el medio ambiente y las emisiones globales de GEI.
El informe de Circle Economy indica que con este modelo se pueden reducir hasta un 39 por ciento los gases de efecto invernadero, además de recortar el uso de los recursos naturales vírgenes hasta un 28 por ciento.
Industrias prioritarias de la economía circular
Todas las industrias son necesarias para potenciar la economía circular, pero existen algunas que deben sumarse con urgencia para no seguir afectando aceleradamente al planeta.
Por ejemplo, la industria de transportes genera la huella de emisiones más grande, con 17.1 mil millones de toneladas debido al uso de combustibles fósiles utilizados para la transportación o carga.
En segundo lugar se encuentra la vivienda, con un total de 13 mil 500 millones de toneladas. En esta actividades se ven involucradas acciones como la construcción, extracción, iluminación y calentamiento de los hogares, para lo que se emplean grandes cantidades de fuentes de energía no renovables.
La industria de alimentos y nutrición ocupa el tercer sitio en los mayores niveles de contaminación ambiental, con 10 mil millones de toneladas de emisiones. La producción y la comercialización de alimentos son los detonantes principales de ello y, en conjunto, estas tres industrias son responsables del 70% de los gases emitidos en el mundo.
El papel de las personas y empresas en la economía circular
Las grandes industrias juegan un rol fundamental en la adopción de una economía circular, al ser quienes fabrican y, por tanto, inician el ciclo de producción del modelo.
Algunas de las soluciones para minimizar los gases contaminantes son el diseño y uso eficiente de productos de consumo, la reducción de medios de transporte de fuentes no renovables, la producción de comida sustentable y la construcción circular de las materias primas.
De la mano está el papel de los consumidores, quienes pueden contribuir al adoptar medios de transporte no contaminantes, como la bicicleta o los vehículos eléctricos; la compra de alimentos orgánicos y productos reciclados con una larga vida de uso.
La transición hacia una economía totalmente circular es responsabilidad de todos. En Selvas y Solares, nos conformamos por diversas cooperativas campesinas, quienes elaboran productos naturales con un manejo sostenible de sus territorios y el mayor respeto hacia los ecosistemas en todas las etapas del proceso. ¡Conócenos!